BlueDot, una compañía canadiense de IA, ha estado bajo la lupa en las últimas semanas porque han prevenido respecto al coronavirus y publicado proyecciones días antes que la OMS. Lograron esto al conectar diversas fuentes de información más allá de las estadísticas oficiales. Las TI y, especialmente la IA, puede jugar un rol fundamental en prevenir, predecir y diagnosticar casos de coronavirus. Expliquemos cómo las nuevas tecnologías están ayudando a las autoridades y a los proveedores de servicios de salud a lidiar con el coronavirus.
El algoritmo de BlueDut
BlueDot no se basa únicamente en casos reportados oficialmente. Toma esa información, noticias de periódicos y portales alrededor del mundo, reportes de redes de seguimiento de enfermedades animales y data de aerolíneas. El resultado es un predictor que simula mejor la expansión de la enfermedad que los algoritmos que se basan en la data oficial.
El seguimiento tradicional se enfoca en detallar dónde y cuándo se enfermó la gente para identificar la fuente del brote y la población en riesgo. BlueDot va un paso más allá, analizando cómo la enfermedad se expande en distintas poblaciones. Esto ayuda al algoritmo a predecir dónde pueden ocurrir los brotes y qué tan rápido puede expandirse. Los laboratorios se enfocan en encontrar curas, mientras que los investigadores pueden predecir adónde irá después y qué impacto podría tener, lo que ayuda a prepararse para la enfermedad.
Sin embargo, la precisión del algoritmo depende de la cantidad y calidad de la data que recibe. Por ejemplo, los datos de redes sociales, como posts sobre estar enfermo, mapas de vuelo, discusiones de foros, son data no-estructurada, que no puede ser fácilmente analizada por cualquier computadora. La data estructurada, como los números de casos por región, puede ser fácilmente procesada.
Sin embargo, algoritmos de deep learning sí pueden entender la data no-estructurada. Este funciona en redes neuronales artificiales, lo que significa que sus procesadores están organizados en capas por las cuales la data pasa. Ahora bien, estos modelos dependen no solo de la cantidad, sino de la calidad de la data que reciben. Los datos de redes sociales son poco confiables, por esta razón, BlueDot no los usa en su modelo.
Ciertamente, los algoritmos son altamente preciso en predecir brotes, pero esto no significa que no necesiten epidemiólogos. La cuestión está en usarla como una herramienta para generar escenarios y predecir nuevos casos y brotes para que las autoridades estén en una mejor posición para responder.
¿Y qué pasa con la tecnología china?
China es el epicentro del coronavirus y las empresas tecnológicas han estado en la primera línea de batalla contra la enfermedad. Por ejemplo, Pudu Technology ha instalado máquinas para asistir el personal médico en 40 hospitales alrededor del país para evitar el contacto con individuos infectados. Alibaba creó una herramienta basada en IA que, según afirman, diagnostica el coronavirus con una precisión del 96 %.
Sin embargo, hay cierta preocupación debido a que el gobierno ha expandido sus sistemas de vigilancia para mantener las cuarentenas y controlar a los ciudadanos infectados. Algunas cámaras de reconocimiento facial han sido mejoradas para identificar a individuos sin máscara y para escanear fiebre en las multitudes.