El Clostridium Difficile es una bacteria que ha sido la responsable de causar cerca de medio millón de casos de distintas enfermedades en Estados Unidos. En este artículo te explicaremos todo sobre ella y qué precauciones debes tomar como doctor y como paciente
El C. Difficile, o Clostridium Difficile se trata de una bacteria que se encuentra en el medio ambiente y es la responsable de distintas enfermedades intestinales que van desde una leva como la diarrea, hasta afecciones más serias como la colitis. Normalmente es complicado que un ser humano sano se infecte de la misma, lo más común es que sea contraída cuando el mismo se encuentra en un tratamiento de antibióticos en el momento, esto es debido a que los antibióticos, así como son los encargados de eliminar las bacterias dañinas en las distintas infecciones, también se encargan de eliminar las positivas que te protegen frente amenazas como la C. Difficile y, cabe destacar, que la eliminación de estas bacterias positivas puede extenderse hasta un par de meses.
Esta infección suele propagarse cuando no se mantiene una correcta higiene y personas contaminadas de heces afectadas entran en contacto con alimentos u objetos puesto que de esta forma los contaminan y otro individuo puede hacer contacto con los mismos. Hasta ahora la misma es la responsable de causar hasta medio millón de casos y 29.000 muertes sólo en Estados Unidos cada año.
¿Cuáles son los síntomas de Clostridium Difficile?
Entre los síntomas que puede causar esta bacteria se encuentra principalmente la diarrea, seguido de distintas afecciones estomacales como dolor o sensibilidad estomacal, pérdida del apetito en el paciente, náuseas, fatiga y desequilibrio físico general como fiebre y debilidad gracias a la pérdida de líquidos, que si no llega a ser tratada a tiempo puede representar un peligro por deshidratación.
¿Cuál es el problema con los doctores y la C. Difficile?
Se ha comprobado tras estudios realizados por investigadores de la Universidad de Plymouth, en Reino Unido, que las batas quirúrgicas y los instrumentos médicos que se han visto contaminados con dicha bacteria, se mantienen contaminados incluso luego de haber sido limpiados con desinfectante, según una investigación publicada en Applied and Evironmental Microbiology, la revista oficial de la Sociedad Americana de Microbiología.
Tina Joshi, la líder de la investigación, afirmó que dichos estudios se llevaron a cabo puesto que se sospechaba que en un hospital de Estados Unidos con tedencia a infección de la C. Difficile, las esporas se transmitían a través de las batas de un solo uso. Los resultados arrojaron que, efectivamente, tanto las batas como las distintas superficies se encontraban infectadas y que dicha infección ocurría en los primeros 10 segundos de contacto. En sus conclusiones resaltó que es importante lograr que las batas de aislamiento quirúrgicas garanticen la correcta prevención y control tanto de esta como otras bacterias, por lo que se expuso que era necesario deshacerse de las batas al salir de las habitaciones para evitar la transmisión de esporas, así como también utilizar una mayor cantidad de biocida puesto que la cantidad que se utiliza no es suficiente para lograr una correcta desinfección de los espacios.
“Este trabajo puede aplicarse a hospitales de cualquier parte del mundo y debería ayudar a informar las futuras directrices sobre el control de infecciones y biocidad” destacó la doctora Tina Joshi, profesora de microbiología molecular.