“Las grandes compañías entienden la importancia de las marcas. Hoy, en la era de las personas, tú debes ser tu propia marca”, escribió Tom Peters, experto en gestión empresarial y escritor estadounidense, en 1997. Esta fue la primera vez que se empezó a hablar de personal branding o marca personal.
Anna Zarkada, profesora de Economía y Negocios de la Universidad de Atenas (Grecia), define la marca personal como “un concepto relacionado con las estrategias de marketing que una persona adopta con el fin de promocionar sus mejores características personales”. En pocas palabras, la marca personal es aquella percepción que deseamos que los demás tengan de nosotros.
Al igual que la marca de un producto o servicio, detrás de ella hay elementos, valores y atributos que permiten erigirla y ser percibida externamente según los objetivos que se pretenden alcanzar. De la misma forma debe trabajarse cuando se trata de la marca personal, pues no es algo que se produzca automáticamente.
No obstante, en su proceso de construcción es común la presencia de fallas y ligerezas que pueden traer consecuencias negativas para nuestro desarrollo profesional. La mínima incuria afectaría nuestras aspiraciones de conseguir mejores oportunidades laborales o, en el caso de los emprendedores, de ofrecer servicios como freelance.
Estos son algunos errores que debes evitar en la construcción de tu marca personal:
- Falta de una estrategia: En marketing, la planeación es una etapa fundamental de todo proyecto. Con esto se procura reducir los márgenes de error y aleatoriedad. De la misma manera, una estrategia te permitirá establecer objetivos más claros y tácticas para alcanzarlos. Una matriz FODA personal es un ejercicio interesante y te ayudará a establecer tu situación actual e intenciones futuras.
- Poca originalidad: El éxito en el mercado consiste en diferenciarse y aportar un valor agregado respecto a la competencia. Si intentas imitar cualidades de otros, carecerás de una identidad propia, lo que repercutirá en un posicionamiento fallido en el target que hayas definido.
- Perfiles sin optimizar: Las redes sociales son el escenario que el público usará para crear una imagen de ti y de tu trabajo. Si estas lucen desactualizadas e incompletas, será difícil que el mensaje que intentas transmitir llegue con claridad, pues habrá confusiones y percepciones dispares. LinkedIn es un excelente medio para empezar a consolidar tu marca personal (lee el artículo Claves para optimizar tu perfil de LinkedIn en 2021).
- Prescindir del networking: De poco sirve la consolidación de una marca personal si no tienes a quién comunicarla o con quiénes compartirla. Una correcta gestión del personal branding se basa en la creación de alianzas, a través de medios en línea y presenciales, con personas que comparten tu industria y campos de acción.
- Impaciencia por resultados inmediatos: Como el posicionamiento de una marca comercial, esto se trata de un proceso que solo se materializará exitosamente a través de un trabajo constante. Por lo tanto, requiere de compromiso y regularidad para que veas resultados satisfactorios a mediano y largo plazo.