Así son ahora las clases en Atlantis
Con máscaras, distanciamiento social y la mitad de los alumnos de la clase atendiendo de manera remota, iniciaron nuevamente las clases presenciales en nuestra universidad. La nueva realidad ha demandado una serie de cambios y adaptaciones, así como la creación de un equipo especial de seguridad, en Atlantis University, que se encarga de garantizar el cumpliento de las normas y el seguimiento de las indicaciones dadas por el CDC (Centers for Disease Control and Prevention) y la WHO (World Health Organization) para evitar la propagación del Covid19.
Los estudiantes han comentado que aunque extrañan la cercanía que era posible antes del 2020, disfrutan el hecho de poder estar nuevamente en las aulas de clases, hablar cara a cara con sus profesores, y compartir el espacio con sus compañeros de aprendizaje.
“Es una experiencia diferente pero es lo que debemos hacer mientras las cosas vuelven a la normalidad, adaptarnos. Los seres humanos somos fuertes y capaces de vencer cualquier reto si lo tomamos con tranquilidad, aceptamos las cosas como son, y esperamos pacientemente que todo vuelva a la normalidad”, dijo una de nuestras estudiantes de la Maestría en Administración de Empresas (MBA).
Modalidad híbrida
Con el fin de garantizar el bienestar y la salud de los estudiantes y los integrantes del staff, Atlantis diseñó una modalidad denominada híbrida, que significa que los alumnos atienden a sus clases 50% del tiempo presencial y 50% en línea.
“Desarrollar esta opción para nuestros estudiantes fue posible gracias al apoyo y esfuerzo de los equipos IT, Registro, Planificación Académica, Soporte y en general, a todos los miembros de nuestra comunidad AU”
El uso de las nuevas tecnologías fue indispensable para llevar la experiencia del aprendizaje a otro nivel. Durante semanas, el equipo AU trabajó en adaptar los salones de clases para permitirles a los estudiantes, que atienden desde casas, experimentar lo mismo que sus compañeros presentes en el aula.
Planificación Académica
Otro de los grandes retos para lograr esta modalidad fue la división de los salones de clase. “Las clases fueron divididas en dos. De esta manera logramos que los alumnos que atienden presencialmente durante una sesión, lo hagan desde sus casas en la siguiente, es la mejor manera de garantizar que nunca se exceda la capacidad de cada salón, y que todos los presentes tengan incluso más distancia que la sugerida entre ellos.”